miércoles, 25 de abril de 2012

Jeroglífico: La china y el rechoncho

Había una china que estaba casada con un hombre un poco obeso pero con aires de galán. Una tarde, iban paseando por el parque, cuando otra mujer se giró mirando con ojos seductores al mancebo y le soltó un piropo en plan albañil.
La china, con gesto de rabia, enganchó de la cabellera a la mujer y le dijo unas palabras para dejar claro que el hombre era suyo.

¿Qué le dijo la china a la golfilla?

 

 IDEM

(para los ingleses)